No hay que darle más vuelta de hoja. No tienes que forzar.
Supongo que me lo mereceré.
No hay nada detrás de la cortina. Por más que se quiera buscar.
El día en que aparezca algo...allí estaré.
No quiero ver lo negro, blanco
ni dulce lo salado,
pero se que en mi más profundo pensamiento
reniego y me contrasto con mi lamento.
¿Por qué hay que aguantar?
¿Por qué tengo que esperar?
¿Qué es lo que acaso hice mal...
...esta sensación que me destripa y me hipnotiza
y que me resulta tan familiar?
...no hagas que me arrepienta...Llamar a tu casa, dar una vuelta,
tomarnos algo, ganarnos el cielo,
sólo quiero estar contigo...
Jugar a los dados, deshacer la maleta,
creernos algo, derretir el hielo,
ahora, quítate el abrigo...
Quizás me esté equivocando, quizás no se lo que hago
siempre que voy remando, siempre caigo al lago.
Todo se hace cuesta arriba, y no la podemos subir,
no la podemos subir, subir, subir, subir...
¿Por qué hay que aguantar?
¿Por qué tengo que esperar?
¿Qué es lo que acaso hice mal...
...esta sensación que me destripa y me hipnotiza
y que me resulta tan familiar?
...desentierra tu alma...Llamar a tu casa, dar una vuelta,
tomarnos algo, ganarnos el cielo,
sólo quiero estar contigo...
Jugar a los dados, deshacer la maleta,
creernos algo, derretir el hielo,
ahora, quítate el abrigo...
Abrázame, siento tu aliento,
sígueme, ven conmigo,
entra en la habitación...
Apaga la tele, hazlo lento,
no hables, no somos amigos,
ahora no...